Capitulo 2: Un Frio Odio
Enril se puso a buscarlo durante muchos meses y esto le llevo hasta la capital de Stirland, donde según decían Alius había estado por última vez. Pero Enril no lo encontró, después de buscarlo por pueblos de alrededor de la ciudad durante tres meses le dijeron que partió hacia Talabecland así que decidió volver a su casa y darse por vencido, pues hacia ya cuatro años desde que Alius se fue y era muy posible que ya estuviera por lo menos por Middenland.
A la vuelta todos le preguntaron si sabía algo de él, y siempre respondía - se ha marchado porque quiere olvidar- y así hasta que llego a su casa. Entro y se encontró con un hombre que estaba sentado frente a la chimenea contemplando el fuego mientras sujetaba con la mano derecha la pipa que estaba fumando , Enril grito ¡quién es usted y como ha entrado en mi casa!, el hombre se dio la vuelta y se levanto, iba vestido con una gabardina una coraza unas botas con la puntera de hierro, un sombrero un pantalón negro, unas hombreras i unas brazaletes de hierro y estaba armado con dos pistolas y un florete, y tanto de la coraza como del florete colgaban cintas con escritos de la biblia de Sigmar, pero donde más se concentraban era en la empuñadura del florete. Enril repitió la pregunta al mismo tiempo que cogía una vara que tenía detrás de la puerta y el hombre respondió –quien más que nosotros tiene una llave de esta casa-, entonces este levanto la cabeza y Enril grito ¡Alius! Al mismo tiempo que soltaba la vara y la dejaba caer en el suelo, alius asintió con la cabeza y dijo –sé que me estabas buscando, pero me lo dijeron cuando te habías ido de la ciudad para buscarme en otros lugares cercanos. Así que ya que no tenía trabajo decidí venir y esperarte aquí-. ¿Trabajo? Respondió Enril y luego después de una pequeña pausa dijo-es por eso por lo que tuviste que irte a Talabecland-. Si respondió Alius-desde hace dos años y medio soy un cazador de brujas-dijo con orgullo, Enril comprendió él porque de esta decisión, y seguidamente dijo -¿y qué es lo que sueles hacer o “cazar”?-, Alius respondió con rapidez –pues, seguidores del caos sectarios algún que otro pequeño demonio o engendro-,-¿y vampiros no?- dijo interrumpiendo Enril. Se produjo un pequeño silencio y Alius dijo-si, sobre todo vampiros- después de esto Enril dijo- ya decía yo-,-¿Cómo?- respondió Alius rápidamente, Enril se sentó en una silla y dijo –sabia que te habías ido por lo que paso, pero no me esperaba que ahora tú te dedicaras a hacer una caza contra ellos, no te das cuenta de que te pareces a ellos, de que haces lo que ellos que es cazar-,-yo solo quiero que nadie tenga que presenciar lo que yo por desgracia presencie, lo que hago es matar a todo vampiro que me encuentro o al que me dicen que han visto-. Después de esto Enril añadió- no puedes vivir toda tu vida con ese odio-,-¿y porque no? Ningún vampiro volverá a pisar estas tierras-dijo Alius rapidamente.-eso ya es imposible pues los vampiros se extienden mas allá de las fronteras del imperio-dijoEnril , Alius ya no respondió se dio la vuelta se sentó de nuevo en la silla cogió la pipa y se paso toda la tarde sentado enfrente del fuego pensando.
Por la noche su abuelo lo llamo para cenar, cuando estaban en la mesa nadie dijo nada, hasta que por la ventana entro un búho con una nota en la pata que decía así:”se ruega al cazador Alius que parta hacia Imderburgo con la mayor brevedad posible, por un avistamiento de seguidores del caos en la zona”. Alius se levanto y se fue hacia la puerta y dijo-me tengo que ir a una misión, bueno me he alegrado de verte-,su abuelo se levanto y dijo-espero que comprendas que no puedes exterminar a los vampiros uno por uno y que no puedes pasarte la vida así-, Alius se agacho para recoger la vara que Enril dejó caer antes y cuando se levanto dijo con la cara seria-ya lo sé pero hasta que lo consiga tengo que seguir así-Enril lo miro y luego se quedo extrañado y dijo-¿Cómo sabia el búho que estabas aquí? –Es un secreto-dijo Alius con una pequeña sonrisa en los labios-luego cogió la vara la apoyo detrás de la puerta, abrió la puerta y se marcho.
Su abuelo se pregunto-¿Qué habrá querido decir con eso de hasta que lo consiga?-.
Enril se puso a buscarlo durante muchos meses y esto le llevo hasta la capital de Stirland, donde según decían Alius había estado por última vez. Pero Enril no lo encontró, después de buscarlo por pueblos de alrededor de la ciudad durante tres meses le dijeron que partió hacia Talabecland así que decidió volver a su casa y darse por vencido, pues hacia ya cuatro años desde que Alius se fue y era muy posible que ya estuviera por lo menos por Middenland.
A la vuelta todos le preguntaron si sabía algo de él, y siempre respondía - se ha marchado porque quiere olvidar- y así hasta que llego a su casa. Entro y se encontró con un hombre que estaba sentado frente a la chimenea contemplando el fuego mientras sujetaba con la mano derecha la pipa que estaba fumando , Enril grito ¡quién es usted y como ha entrado en mi casa!, el hombre se dio la vuelta y se levanto, iba vestido con una gabardina una coraza unas botas con la puntera de hierro, un sombrero un pantalón negro, unas hombreras i unas brazaletes de hierro y estaba armado con dos pistolas y un florete, y tanto de la coraza como del florete colgaban cintas con escritos de la biblia de Sigmar, pero donde más se concentraban era en la empuñadura del florete. Enril repitió la pregunta al mismo tiempo que cogía una vara que tenía detrás de la puerta y el hombre respondió –quien más que nosotros tiene una llave de esta casa-, entonces este levanto la cabeza y Enril grito ¡Alius! Al mismo tiempo que soltaba la vara y la dejaba caer en el suelo, alius asintió con la cabeza y dijo –sé que me estabas buscando, pero me lo dijeron cuando te habías ido de la ciudad para buscarme en otros lugares cercanos. Así que ya que no tenía trabajo decidí venir y esperarte aquí-. ¿Trabajo? Respondió Enril y luego después de una pequeña pausa dijo-es por eso por lo que tuviste que irte a Talabecland-. Si respondió Alius-desde hace dos años y medio soy un cazador de brujas-dijo con orgullo, Enril comprendió él porque de esta decisión, y seguidamente dijo -¿y qué es lo que sueles hacer o “cazar”?-, Alius respondió con rapidez –pues, seguidores del caos sectarios algún que otro pequeño demonio o engendro-,-¿y vampiros no?- dijo interrumpiendo Enril. Se produjo un pequeño silencio y Alius dijo-si, sobre todo vampiros- después de esto Enril dijo- ya decía yo-,-¿Cómo?- respondió Alius rápidamente, Enril se sentó en una silla y dijo –sabia que te habías ido por lo que paso, pero no me esperaba que ahora tú te dedicaras a hacer una caza contra ellos, no te das cuenta de que te pareces a ellos, de que haces lo que ellos que es cazar-,-yo solo quiero que nadie tenga que presenciar lo que yo por desgracia presencie, lo que hago es matar a todo vampiro que me encuentro o al que me dicen que han visto-. Después de esto Enril añadió- no puedes vivir toda tu vida con ese odio-,-¿y porque no? Ningún vampiro volverá a pisar estas tierras-dijo Alius rapidamente.-eso ya es imposible pues los vampiros se extienden mas allá de las fronteras del imperio-dijoEnril , Alius ya no respondió se dio la vuelta se sentó de nuevo en la silla cogió la pipa y se paso toda la tarde sentado enfrente del fuego pensando.
Por la noche su abuelo lo llamo para cenar, cuando estaban en la mesa nadie dijo nada, hasta que por la ventana entro un búho con una nota en la pata que decía así:”se ruega al cazador Alius que parta hacia Imderburgo con la mayor brevedad posible, por un avistamiento de seguidores del caos en la zona”. Alius se levanto y se fue hacia la puerta y dijo-me tengo que ir a una misión, bueno me he alegrado de verte-,su abuelo se levanto y dijo-espero que comprendas que no puedes exterminar a los vampiros uno por uno y que no puedes pasarte la vida así-, Alius se agacho para recoger la vara que Enril dejó caer antes y cuando se levanto dijo con la cara seria-ya lo sé pero hasta que lo consiga tengo que seguir así-Enril lo miro y luego se quedo extrañado y dijo-¿Cómo sabia el búho que estabas aquí? –Es un secreto-dijo Alius con una pequeña sonrisa en los labios-luego cogió la vara la apoyo detrás de la puerta, abrió la puerta y se marcho.
Su abuelo se pregunto-¿Qué habrá querido decir con eso de hasta que lo consiga?-.
No hay comentarios:
Publicar un comentario